domingo, 13 de mayo de 2012

Esto que siento

El desorden de mi vida
las cicatrices de mi espanto
la herencia de dinamita.
El corazón en vano
y su muerte.
Las pausas de mi delirio son mi descanso
y las dulces gotas mi descripción.
Sangre de toro me dejaron,
que se camufla con la paz,
servir de bien es mi intento,
¡Hay Dios dime lo correcto!
te echo de menos.

Vuelvo a las palabras, porque son mi comunicación
y confidentes,
oyentes silenciosos que comprenden los secretos,
estados y vivencias.

Mau

Dime si me ves escribiendo esto
mi pequeña alegría.
Hazme saber que volverás
a verme algún día.
Que te acurrucarás en mi brazo
y no me dejarás llorar
por tu alma ida.
Fuiste tan feliz
gozo perpetuo,
y te fuiste tan rápido
de mi persona desdicha.
Dime que todavía sigues ahí,
jugando entre mis pies, pequeño.