Cultivando a mi madre desde mi nacimiento
hoy no entiendo como todo se ha destruido.
Ya no oigo al ave cantar, ni a mis hermanos.
Llevo cicatrices en el cuerpo,
llevo corazones descubiertos
llevo mi casa derrumbada
y un pueblo muerto.
¡Como debe estar mi inti llorando!
estallando fuego a los destructores,
llorando, si, llorando.
Me he quedado solo,
pues ya no gobierna mi naturaleza,
si no el hombre blanco,
el que me ha quitado todo,
hasta mi propio llanto.
Encerrado estoy,
infeliz me he vuelto,
trabajando para morir.
¡Oh inti recibeme en tu regocijo y llévate esta tempestad.
Has que el hombre alto de impurezas nos devuelva lo perdido!
...nuestra tierra.
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